Lomo Oscuro
EXTENSIÓN: 2,60 Km2
DESCRIPCIÓN GENERAL: Lomo Oscuro es el primer barrio de Sur a Norte que no se distribuye de costa a cumbre, es por ello que Lomo Oscuro carece de monte, limitando en su margen Oeste con La Sabina, por el Norte con San Simón y al Sur con Malpaíses.
El nombre de Lomo Oscuro deriva posiblemente de los oscuros malpaíses que ocupan gran parte de su territorio.
Al no tener zona montana el barrio no cuenta con grandes masas boscosas, ni de laurisilva o monteverde, ni de pinar. Ecosistemas como bosques termófilos o el tabaibal-cardonal tampoco llegan en la actualidad a desarrollarse en el barrio. Los matorrales de sustitución, mayoritariamente higuerillas, tapizan casi toda su extensión, al igual que los pastizales en las cotas más bajas. Este paisaje es un claro indicativo del abandono de las prácticas agrícolas que se extendían antiguamente por todo el municipio.
En la costa del barrio se localizan varias de las playas más conocidas de Villa de Mazo. Se trata de La Cangrejera y El Pozo. En torno a la primera se han edificado varias viviendas, mientras que junto a la segunda tan solo un pequeño núcleo de casetas. Estas calas constituidas por pequeños callados y arena negra, cuentan con bastantes asiduos, ya sea para su uso como zonas de baño o para aprovechamientos pesqueros y marisqueros. A esto ha favorecido sin duda el hecho de estar algo protegidas de los vientos dominantes por el saliente de la Punta del Morro.
Existe un sendero en el barrio, antaño muy conocido por todos los vecinos, pues era el que comunicaba la costa con la parte alta del barrio, extendiéndose incluso hasta La Sabina, donde conecta con otros senderos. Se trata del camino de Las Cavichuelas que permitió en el pasado el trasiego de gente desde la costa hasta lo alto del barrio, facilitando el aprovechamiento vertical de los recursos (marisqueo, pesca, pastos para el ganado, cereales, etc.) y que hoy prácticamente está en total desuso. Parte del camino ha sido aprovechado para la apertura de una pista que facilita el acceso a las fincas de viña allí presentes. En el resto del camino aún podemos admirar el tesón de aquellos vecinos, que en éste y otros tantos senderos, empedraron el suelo para facilitar la andadura a personas y bestias y levantaron muros de piedra seca en los bordes para delimitarlos y protegerlos del viento.
El barranco de La Chíchara es el límite natural entre Malpaíses y Lomo Oscuro. Se trata de un lugar de gran interés por la presencia en él de múltiples cuevas, por lo que también se le conoce con el nombre de barranco de las Cuevas, siendo la más conocida el Caboco de Belmaco. La Cueva de Belmaco es uno de los recursos culturales más interesantes de todo el municipio. Allí se conjugan valores naturales, con la presencia de elementos vegetales endémicos de interés (palmeras, dragos, pinos, etc.) y, sobre todo, valores culturales, al tratarse de una cueva de habitación usada por los aborígenes. En la actualidad el conjunto etnográfico en torno a la Cueva de Belmaco constituye un parque arqueológico. Su ubicación cercana a la carretera general LP-132 ha contribuido a su conocimiento por parte de la población. La cueva fue habitada por los aborígenes, y en ella se han encontrado restos de cerámicas, utensilios, huesos, etc. pero lo más conocido, sin duda, son sus grabados rupestres. En el siglo XVIII se hallaron los primeros petroglifos junto a la cueva, siendo los pioneros de Canarias. En la actualidad el empeño de las Autoridades y de los vecinos por rescatar este importante patrimonio para nuestro municipio se ha culminado con la creación de un centro de interpretación, en el que el visitante puede indagar en las claves del mundo aborigen, a la vez que realizar un sendero autoguiado que le descubrirá las bellezas de este paraje en el cauce del barranco.
La Ermita de San Juan de Belmaco fundada en 1705 por el presbítero Juan Fernández Yanes, es la más antigua de todo el municipio, y complementa el valor cultural de este barrio. Se trata de un edificio sencillo, de una sola nave y con escasa cantería en el exterior. En este entorno, entre la cueva de Belmaco y la ermita existen otros elementos arquitectónicos y etnográficos de interés que merecen resaltarse. Junto al barranco se ubican un par de viviendas de arrimo de dos plantas de las más antiguas de la Isla, también junto a la ermita hay una portada antigua al borde del camino empedrado que nos indica la presencia de una vieja hacienda, así como un nicho de cruz.
La agricultura en Lomo Oscuro está dominada hoy en día por los viñedos, únicos cultivos capaces de crecer sobre el sustrato pedregoso y soportar los fuertes vientos que azotan la zona. Como otras áreas de Villa de Mazo, años atrás estuvo cultivada de cereales e incluso boniatos en los “pardones” sobre los que hoy tan solo se desarrollan pastizales y que aportan una imagen parda en los meses estivales a la zona baja del barrio. El resto de agricultura de secano se limita a esporádicos cultivos en torno a las viviendas aún habitadas. Los cultivos de exportación están representados puntualmente en el barrio por la presencia de unas pocas fincas de plátanos en la zona de La Cangrejera.